Los 10 principios del buen Diseño

Según Dieter Rams

01. El buen diseño es innovador

Es improbable agotar las posibilidades de innovación en el diseño debido a que el desarrollo tecnológico ofrece continuamente nuevas oportunidades para innovar en cada diseño.

02. El buen diseño provee de utilidad a cada producto

El objetivo primordial de un producto es su utilidad. Su diseño es primordialmente práctico y de manera secundaria tiene que satisfacer ciertos criterios de carácter psicológico y estético.

03. El buen diseño es estético

El diseño bien ejecutado no carece de belleza. La calidad estética de un producto forma parte integral de su utilidad ya que los productos utilizados cotidianamente tienden a tener un efecto indirecto en las personas y su bienestar.

04. El buen diseño hace un producto comprensible

Un buen diseño simplifica la estructura del producto y lo predispone a expresar claramente su función mediante la intuición del usuario.

05. El buen diseño es discreto

Todo producto y su diseño debe de ser simultáneamente neutro y sobrio. Su sobriedad y neutralidad tienen como objetivo el proveer un espacio de expresión para el usuario. Todo producto bien diseñado cumple un propósito semejante a aquel de toda herramienta y por lo tanto un buen diseño no confunde la identidad de sus productos con objetos de decoración ni con obras de arte.

06. El buen diseño es honesto

Un diseño honesto nunca intenta falsificar el auténtico valor e innovación del producto dado. Asimismo, un diseño verdaderamente honesto nunca trata de manipular al consumidor mediante promesas de una utilidad inexistente o más allá de la realidad física del producto.

07. El buen diseño es longevo

Toda moda es inherentemente pasajera y subjetiva. La correcta ejecución del buen diseño da como resultado productos inherentemente objetivos y anacrónicamente útiles. Estas cualidades se ven reflejadas cuando los usuarios tienen la tendencia de atesorar y favorecer aquellos productos bien diseñados incluso en aquellas sociedades cuyas tendencias de consumo claramente favorecen productos desechables.

08. El buen diseño es consecuente en todos sus detalles

Un buen diseño nunca deja nada al azar dado que el cuidado y la exhaustiva precisión de cada detalle expresa el respeto de los diseñadores para con sus consumidores. Cada error es una falta de respeto.

09. El buen diseño respeta el medio ambiente

Un buen diseño debe de contribuir significativamente a la preservación del medio ambiente mediante la conservación de los recursos y la minimización de la contaminación física y visual durante el ciclo de vida del producto.

10. El buen diseño es tan poco diseño como sea posible

“Menos, pero con mejor ejecución”, destacando el hecho de que este enfoque fomenta los aspectos fundamentales de cada producto y por lo tanto evita lastrarlos torpemente con todo aquello que no es esencial. El resultado ideal es productos de mayor pureza y simplicidad.